Los jóvenes socialistas consideran que se tiene que hacer un gran esfuerzo nacional para acabar contra la violencia de género adolescente, y piden la elaboración de Planes de Prevención en todos los Ayuntamientos y CC.AA
La campaña pretende dar claves a mujeres jóvenes y adolescentes para que sepan detectar los primeros síntomas de violencia y poner freno a estos comportamientos a tiempo
Juventudes Socialistas de España (JSE) ha presentado su nueva campaña contra la violencia de género, puesta en marcha con motivo de la celebración del Día Internacional para la Eliminación de la violencia sobre las mujeres. Una campaña que, bajo el lema “Vamos a acabar con la violencia de género entre los jóvenes”, tiene como objetivo fundamental prevenir esta lacra social, mediante la sensibilización y la prevención desde las edades más tempranas”.
Para el Secretario General de JSE, Sergio Gutiérrez, “acabar con la violencia de género entre adolescentes tiene que ser una prioridad para toda la sociedad. Hemos de hacer un gran esfuerzo nacional en la misma dirección desde todas las Administraciones Públicas y conseguir, de cara a las próximas elecciones autonómicas y municipales, que todos los grupos políticos se comprometan a elaborar planes locales y autonómicos para la erradicación de este tipo de violencia entre los jóvenes, porque cada minuto cuenta en la tarea de erradicar la violencia de género”.
“Podemos acabar con la violencia de género entre los jóvenes, pero para ello es necesario que actuemos desde lo local, que vayamos allí donde están los jóvenes, a centros educativos y zonas de ocio, fundamentalmente, y que, tal y como hemos querido hacer desde JSE con esta campaña, reivindiquemos, informemos y sensibilicemos sobre la existencia de violencia de género en las parejas jóvenes, que les demos claves para que sepan detectar los primeros síntomas de violencia, y les incitemos a frenar de raíz este tipo de comportamientos. “
Para conseguir este objetivo, los jóvenes socialistas han editado vídeo, carteles, pegatinas y octavillas informativas, y han preparado toda una serie de actividades, como performances y proyección de cortos sobre violencia de género, que se realizarán en las calles de pueblos y ciudades de toda España a partir del próximo día 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia sobre las Mujeres, y hasta finales de enero.
El Secretario General de JSE ha explicado que esta campaña nace de la preocupación por los últimos informes sobre violencia de género entre adolescentes, en los que se constata la prevalencia entre las parejas más jóvenes de roles tradicionales de dominación y de actitudes de control que pueden desembocar en violencia.
Según ha informado Gutiérrez, cerca del 40% de las denuncias por maltrato son presentadas por mujeres menores de 30 años, un problema que no sólo se circunscribe a nuestro país, ya que la organización Mundial de la Salud ha alertado de que la violencia de género es la primera causa de pérdida de años de vida entre las mujeres de 15 a 44 años, por encima de las guerras, los accidentes de tráfico o los distintos tipos de cáncer.
“La violencia de género en los noviazgos de adolescentes no es una anécdota. Un 12% de los adolescentes reconoce que en una ocasión o más ha pegado o empujado a su pareja. A pesar de los muchos avances logrados, los expertos se encuentran con que todavía permanece la repetición de unos estereotipos sociales que sobre el papel ya han caducado, y que son la causa directa de que un 32,1% de chicos y un 14,4% de chicas considere normal que un chico obligue a su novia a mantener relaciones sexuales con él en alguna ocasión, o que entre un 15% y un 25% de las chicas piensan que solo obtendrán felicidad, seguridad y protección si están en pareja”.
Una actitud que para el Secretario General de JSE define una relación no igualitaria, y que demuestra que “todavía no hemos sido capaces de modificar el esquema violento, instaurado en las raíces de nuestra sociedad y basado en la estructura de poder y supremacía en las relaciones, del hombre sobre la mujer”.
“Y aquí está una de las bases fundamentales del problema. Los adolescentes, de manera inconsciente, reproducen las pautas de comportamiento que han aprendido en su entorno, con un problema añadido. Además, los trabajos realizados con adolescentes coinciden al afirmar que la normalización de la violencia de género en la adolescencia es mayor si cabe que en otras edades, y establecen que tanto ellos como ellas son capaces de describir la violencia, conocen casos de violencia de género, y pueden identificarla sobre el papel, pero, en general, creen que se trata de algo que sólo le ocurre a mujeres mayores que ya están casadas”
“De modo que nos encontramos - ha explicado Gutiérrez- con mujeres que sufren comportamientos que están en la raíz de la violencia de género, pero que no son capaces de identificarlos como tales. Mujeres jóvenes y adolescentes que sufren un control excesivo o violencia verbal, y que no son capaces de asumir, de interiorizar, que están sufriendo maltrato, porque no entra en sus esquemas que alguien de su edad esté sufriendo violencia de género”.
El Secretario General de JSE, además, ha mostrado una gran preocupación por el repunte en el número de víctimas mortales que se ha producido este año ( 62 mujeres y 4 niños y niñas.
“Tenemos instrumentos legales para combatir la violencia de género, pero la Ley Integral no es una varita mágica, sino el primer gran esfuerzo que nos identifica como sociedad. Todos hemos de ser conscientes de que tenemos una responsabilidad adicional y complementaria a la de esta ley. La protección institucional es imprescindible, pero no es suficiente si no va de la mano de la concienciación ciudadana, de medidas de prevención y de una educación en igualdad destinada también a prevenir desde lo local”.
“Queremos hacer un llamamiento a las mujeres maltratadas para que denuncien, porque la denuncia sigue siendo la única puerta para poner en marcha todo el sistema de protección. El 86% de las mujeres asesinadas a manos de sus parejas no habían denunciado a sus agresores, para los que el silencio se ha convertido en un aliado fundamental”.
“Que las mujeres maltratadas denuncien es fundamental, como también lo es, como paso previo, facilitar herramientas para identificar la violencia y para frenarla, e información sobre los mecanismos de los que disponen para salir del terrible círculo que la violencia genera. Éste ha de ser el objetivo”, ha concluido Gutiérrez.