Este titular de prensa, aparecido el pasado viernes en un periódico comarcal, nos deja nuevamente perplejos.
En el artículo se afirma que “las emisiones de Tele Ibi no se interrumpirán mientras se saca a concurso la nueva concesión”. Además anuncia medidas para que “continúen” las emisiones.
Si alguna persona foránea leyera estas líneas, basadas en las declaraciones del Concejal de Comunicaciones Juanjo Santoyo, podría pensar que Tele Ibi ha emitido sin interrupción en 2009, pero es un delirio intentar hacernos creer a los ibenses que esto ha sido así. ¿Querrán que creamos que la emisión nunca su cortó? ¿Pretenderán que creamos que la televisión local ha emitido todos los plenos del 2009? ¿Qué Tele Ibi ha informado de los problemas internos del Partido Popular, de la dimisión de una de sus concejalas y de las irregularidades contables que se han destapado en la gestión del Ayuntamiento? Es demasiado pretender hacernos creer a los ibenses que esta televisión ha recogido de primera mano los actos que semana a semana, durante más de un año, se han venido realizando en Ibi, que se han recogido y retransmitido las opiniones de todos los representantes políticos de Ibi, que se han retransmitido los eventos deportivos,…
Si volvemos a la realidad nos encontramos nuevamente con el cinismo, manipulación y despotismo a los que nos tienen acostumbrados estos dirigentes encabezados por Mayte Parra y Miguel Ángel Agüera. Una vez más comprobamos que un medio de comunicación público, pagado con el dinero de los ibenses, está al servicio de los intereses de un partido y no a disposición y servicio del pueblo.
Las excusas que pusieron en su día para dejar de emitir fueron que el contrato con la empresa que gestionaba la televisión, según informe de la secretaria, tenía lagunas legales, algo que el grupo municipal socialista había denunciado durante año y medio. Este problema se hubiese solucionado sacando a concurso la concesión de la televisión pero esto no se hizo (no interesaba al PP).
Un año después de dejar de emitir dicen que han renovado el contrato con la empresa que gestionaba Tele Ibi para que la emisión “continúe”. A esto se le puede llamar cara dura.
Se quejan de que la oposición vaya a los juzgados. Para enderezar las maneras que tienen de gobernar estos señores haría falta tener un juez fijo en la casa consistorial.
En el artículo se afirma que “las emisiones de Tele Ibi no se interrumpirán mientras se saca a concurso la nueva concesión”. Además anuncia medidas para que “continúen” las emisiones.
Si alguna persona foránea leyera estas líneas, basadas en las declaraciones del Concejal de Comunicaciones Juanjo Santoyo, podría pensar que Tele Ibi ha emitido sin interrupción en 2009, pero es un delirio intentar hacernos creer a los ibenses que esto ha sido así. ¿Querrán que creamos que la emisión nunca su cortó? ¿Pretenderán que creamos que la televisión local ha emitido todos los plenos del 2009? ¿Qué Tele Ibi ha informado de los problemas internos del Partido Popular, de la dimisión de una de sus concejalas y de las irregularidades contables que se han destapado en la gestión del Ayuntamiento? Es demasiado pretender hacernos creer a los ibenses que esta televisión ha recogido de primera mano los actos que semana a semana, durante más de un año, se han venido realizando en Ibi, que se han recogido y retransmitido las opiniones de todos los representantes políticos de Ibi, que se han retransmitido los eventos deportivos,…
Si volvemos a la realidad nos encontramos nuevamente con el cinismo, manipulación y despotismo a los que nos tienen acostumbrados estos dirigentes encabezados por Mayte Parra y Miguel Ángel Agüera. Una vez más comprobamos que un medio de comunicación público, pagado con el dinero de los ibenses, está al servicio de los intereses de un partido y no a disposición y servicio del pueblo.
Las excusas que pusieron en su día para dejar de emitir fueron que el contrato con la empresa que gestionaba la televisión, según informe de la secretaria, tenía lagunas legales, algo que el grupo municipal socialista había denunciado durante año y medio. Este problema se hubiese solucionado sacando a concurso la concesión de la televisión pero esto no se hizo (no interesaba al PP).
Un año después de dejar de emitir dicen que han renovado el contrato con la empresa que gestionaba Tele Ibi para que la emisión “continúe”. A esto se le puede llamar cara dura.
Se quejan de que la oposición vaya a los juzgados. Para enderezar las maneras que tienen de gobernar estos señores haría falta tener un juez fijo en la casa consistorial.
Por. Antonio Martos
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